Considerada como una experiencia que se desea
repetir, el temazcal busca recuperar la salud a través de la sudoración
profunda
Por
Ma. Consuelo Contreras E
Geranio,
capulincillo, santa maría, pachuli, margaritón, ocotillo, pirul, tulipancillo,
teponanzillo, romero, eucalipto, pericón, más otras, son las hierbas que por lo
general usan los chamanes durante los baños de temazcal, una terapéutica herbal
que ya se practicaba en Mesoamérica mucho antes de la llegada de los españoles (1519).
Utilizado
sobre todo para el post partum, el temazcal busca purificar la mente, el cuerpo
y el espíritu de la mujer parturienta a través del agua, piedras volcánicas,
hierbas, cantos, masajes y fuego,
elementos capaces de devolver al cuerpo la armonía perdida, pues según los
antiguos mexicanos, el cuerpo humano y sus funciones son idénticos a la
estructura y organización del universo.
El
vínculo es tan estrecho que los acontecimientos astronómicos pueden afectar las
funciones corporales y, en sentido contrario, el comportamiento de los hombres
puede afectar el equilibrio y la estabilidad del cosmos.
Según
Dora Sierra Carrillo, doctora en etnología, las curaciones que realizaban las
distintas etnias prehispánicas, estaban profundamente ligadas a los dioses y al
mundo sobrenatural; cualquier violación podía romper la armonía entre el cosmos
y el hombre, y con ello provocar la furia de las deidades, quienes enviaban
como castigo distintas enfermedades. Para recuperar la salud se llevaba a cabo
un rito específico a fin de reparar la ofensa a determinado dios y lograr así
el perdón divino. En este proceso ritual-curativo, el médico o Ticitl (en Náhuatl)
cumplía una función esencial: era el mediador entre el dios y los hombres.
A
pesar de que en las curaciones utilizaban productos de origen vegetal, animal y
mineral, los médicos daban preferencia a las plantas, pues conocían a
profundidad sus efectos curativos y mágicos, de tal suerte que sabían cuáles
eran mejor en infusión y cuáles surtían mayores efectos si las colocaban en el
piso y sobre ellas al enfermo.

¿Pero, qué es un temazcal?
Son
estructuras muy parecidas a un iglú. Esféricas y construidas con materiales
capaces de preservar el calor, como son el adobe, el ladrillo y el lodo. Tienen
una entrada muy pequeña y, en la parte superior, una ventanilla para dejar
escapar el calor en caso necesario. De acuerdo con ejemplos encontrados en
algunas ruinas arqueológicas, sus dimensiones son tales, que las personas que
puede recibir, no van más allá de las cinco o seis, y su altura es tan poca,
que todos deben permanecer sentados o acostados sobre el piso.
Un
elemento esencial en el temazcal es el ombligo, un hoyo que se hace en el piso
para ahí colocar piedras al rojo vivo y que son la fuente de calor.
Inicia el ritual
Cuando
llega el momento, ya el médico o chamán ha elegido, de acuerdo a la enfermedad
que se tiene, las hierbas que van a ser usadas, más una buena cantidad de plantas
hervidas. El enfermo, más una persona
que lo acompañe, deben entrar desnudos y en ayunas. Una vez dentro y bien
cerrada la entrada, el chaman deja caer sobre las piedras candentes una buena
cantidad del agua herbal, produciéndose en ese momento un denso vapor que propiciará
una sudoración profusa en todos.
Es
cuando el chaman empieza sus cánticos y rezos y pide a la diosa Tosi, la madre
de todos los dioses, y la diosa de las hierbas curativas, su intercesión para
que le sea devuelta la salud al enfermo. Con un manojo de hierbas, humedecidas
en el menjurje hervido, azota suavemente al enfermo, especialmente en la parte
doliente y si es necesario, inicia una
serie de masajes terapéuticos. Así,
al someter al enfermo a un calor fuerte con humedad, la circulación de la sangre
aumenta, hay un sudor intenso y se
inicia la eliminación de toxinas a través de la piel. Ése es el principio que
rige al temazcal, una práctica que desintoxica al cuerpo a manera de eficaces
riñones.
Terminada
la sesión, el enfermo se cubre con mantas, se le ofrece una bebida herbal y se
le deja reposar una hora más para que termine de sudar. ¡Pero en la actualidad
no se necesita estar enfermo para vivir esta relajante experiencia¡ El temazcal
como el spa, ya son parte del paquete vacacional.
0 comentarios:
Publicar un comentario